Seguimos con la sección de entrevistas, una vez al mes (siempre que consiga los contactos necesaros) intentaremos conocer algo más de algunos Abogados del Estado ya ejercientes para que nos cuenten un poco de su experiencia. Espero que poco a poco más personas se vayan animando ya que puede resultar muy útil!
Hoy es el turno de José Luis Martínez-Almeida Navasqüés, que es licenciado en Derecho por la Universidad Pontificia de Comillas ICAI-ICADE y entró a formar parte del cuerpo de Abogado del Estado en 2001. Actualmente ocupa la figura de Director Division Jurídico Institucional en la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal.
Supe tarde que quería opositar de hecho estaba apuntado al acabar la carrera a un master que iba a empezar de inmediato.
Sin embargo y por conversaciones que tuve en ese momento con abogados del Estado pensé que no perdia nada por intentarlo, de hecho el master tenia una segunda convocatoria en enero, por lo que si empezaba en septiembre a estudiar y no me convencia podía retomarlo que de hecho pensaba que era lo que me iba a pasar.
Oposité a Abogado del Estado porque tenia cierta tradición en mi familia.
El primer mes lo recuerdo sorprendentemente bien para lo que en ese momento esperaba. Me adapté sin problema a la rutina y al estudio, ayudó que muchos amigos compañeros de carrera también opositaron, y cumplí con el programa que me indicó mi preparador ni siquiera me afectó demasiado tener un solo día libre a la semana.
Mi dia a dia era despertarme para estudiar a las ocho en punto para mi era fundamental empezar pronto porque luego me permitía acabar antes por la tarde que para mi era mas importante porque me dejaba buena sensación de descanso.
Tenia un descanso a media mañana donde leia el periódico, en concreto el marca para relajarme, comía muy rápido porque me echaba una siesta de 45 minutos y luego a media tarde otro descanso auque este muy breve.
Mi rutina de estudio concluía sobre las ocho de la tarde.
La clave para mi era que lo que estudiaba lo hacía de manera absoluta y por tanto del tiempo que dedicaba a estudiar no perdía un minuto y una vez que dejaba de estudiar trataba de olvidar completamente el estudio.
¿Que destacaría de su examen?
De mi examen, tuve la inmensa suerte de aprobar a la primera y no es falsa modestia creo que tuve muchas suerte, destacaría la ilusión con la que fui al primero, creía que lo podía aprobar, la inconsciencia de ir al público bastante confiado ya que para mi era un premio haber llegado hasta allí y no sentía mucha presión quizás porque consideraba que no era mi año, el sentimiento de incredulidad de llegar al primer práctico y verme allí aunque lo disfrute como un premio extra y el quinto lo pase muy mal porque ahí se me disparó la presión una cosa es que no creas que es tu año, y otra es que ya que estas allí y con notas decentes bien metido en el grupo de aprobados no sintiera miedo de suspender y tener que reiniciar todo el proceso cuando lo tenía tan cerca.
Así que pase por todos los estadios posibles desde la ilusión a la inconsciencia y finalmente un miedo importante.
Mi trabajo es mejor de lo que esperaba me ha dado una cantidad de opciones profesionales que prácticamente ninguna oposición te proporciona desde el punto de vista de trabajos que puedas tener, En mi caso he tenido bastantes destinos realmente variados y desde luego la oposición ha satisfecho sobradamente mis expectativas.
Si tuviera que dar algún consejo desde mi experiencia como opositor sería que la oposición si quieres sacarla exige una concentración absoluta y una falta de distracciones en el estudio completa. Cuando uno esta estudiando no existe el mundo y esto implica que no existe nada mas que tu mesa, tus temas y tu fuerza de voluntad.
Lo mismo digo del descanso cuando uno esta descansando solo existe el descanso.
